Gracias por el ánimo, compa. Lo que decía no es tanto sobre la dislexia en concreto, sino que siempre nos piden explicaciones por lo que hacemos o dejamos de hacer, como si tuviéramos la respuesta de todo. Yo no tengo la respuesta ni voy a inventar una. Eso es lo que me cabrea, que todo debe ser súper explicito y sobre-evidente, casi como en un juego infantil donde los niños fingen ser adultos y van narrando lo que hacen, quizás para compensar la evidente falsedad de la situación. Porque, ¿qué es madurar y ser normal? No veo que la gente madure o se vuelva más inteligente, más comprensiva o empática; simplemente crecen, se hacen más viejos y siguen el guión preestablecido. De alguna forma siento que existe una distancia insalvable con la gente, con la mayoría bien-pensante. Yo me siento igual que siempre pero los demás me ven con desconfianza, con una especie de recelo de que vaya a estropear el juego diciendo algo que no se espera que sea dicho, algo que pueda romper la imagen de lo que se supone es o está pasando. Y eso de la inseguridad sobre nuestra propia consciencia creo que es más de lo mismo, la incertidumbre de no saber si tu cabeza olvidó o se inventó algo. Es producto de la segregación social porque, después de todo, lo que tenemos por cierto o por real depende de la respuesta de los demás. Nuestra locura es una ilusión creada en el escenario impuesto de la sociedad y su universo simbólico, donde los profesionales de la salud hacen de jueces y dictaminan cuál es tu problema (sobre todo que es TU problema, sea lo que sea). Saludos Es TU responsabilidad guiar tu vida... eres quien decide si vivir en un mundo de sueños y fantasias o en la pobre y cruda realidad. Sí, también me molesta que la gente se meta donde no se le llama, pero se vive en sociedad y lamentablemente, no me puedo ir a una cueva a vivir, es insano, la gente no nació para estar sola.