Jump to content

Silent Hill - The Novel


DarkDose

Recommended Posts

Esta es una obra que creé inspirada en la gran saga de Silent Hill. Aquí va:

 

Introducción – Flashbacks del pueblo.

En aquellos días, el pueblo de Silent Hill era de aquellos pueblos ubicados en la nada, dónde la población era mínima, y rara vez aparecía un turista por el lugar. Aquellos eran días tranquilos, y Silent Hill tenía más años que un roble. Se contaba la historia, de que en el pueblo yacía una antigua y extraña religion ocultista. Se mantenían aún las creencias que fueron introducidas por los indígenas que habitaban el lugar, mucho antes de que fuera un pueblo. Se le llamaba, la colina sagrada, donde habitaban los dioses que se adoran en Silent Hill.

Stevenson es mi nombre, pero toda la vida mi madre me ha llamado Steve. Nunca conocí del todo a mi padre. Sólo sé que él era un médico, alcohólico y adicto a las drogas. Según mi madre, él se fue de la casa cuando yo aún estaba en el vientre, por lo que ella ha tenido que criarme sola. Nací y crecí en el pueblo de Silent Hill, más bien, en el antiguo Silent Hill, pues el pueblo más tarde, cuando fue convertido en zona turística, fue dividido en varias partes, como el área del Lago Toluca, Silent Hill comercial, y el antiguo Silent Hill. En mis años de niñez, asistí a la escuela elementaria de Midwitch. Recuerdo que allí, asistía una niña pequeña que iba en un grado menos que yo. Su nombre era Alessa, y era sumamente especial. Se decía que era una niña extremadamente triste y solitaria, y que incluso podía mover objetos con su mente. Esto, hacía que los chicos y chicas la discriminaran, y fueran excesivamente crueles con ella. Le ponían apodos como “Bruja” o “Rara”. Incontables veces se sentían sus sollozos en los baños.

Yo, a pesar de no conocerla del todo, cuando podía trataba de cesar estas burlas y para mi ella era una chica incomprendida. Me hubiera gustado haberle dedicado tiempo y hacerle sentir que podía contar conmigo… Pero eso no pasó jamás. Dejó de asistir al colegio, y nunca más supé que pasó con ella. Incluso, hubieron rumores de una supuesta muerte… estos rumores me espantaron. Parecía una chica inocente…

 

Capítulo uno – La actualidad y comienzo de la pesadilla.

Después de aquellos recuerdos, nos trasladamos a la actualidad. El pueblo cada vez cuenta con menos gente. Se ha convertido en una zona turística por completo, pero en vez de llegar turistas, la gente parece abandonar. Se han esparcido rumores ridículos, como una supuesta maldición. Naturalmente, no creemos que eso sea la causa con mi madre.

Silent Hill, es de esos típicos pueblos americanos. Casas pintorescas, un buen vecindario, y un paisaje muy bonito, y famoso por su gran lago Toluca. Sin embargo, los adictos al ocultismo que aún permanecen en este pueblo, parecen ahuyentar a los turistas. Como mencioné anteriormente, en el pueblo hubo una religión dominante de carácter ocultista. Ahora el pueblo, está en un estado lastimoso. La mayoría de las casas están en venta, pero nadie las compra. Todos parecen mudarse sin razón, y incluso comienzo a sentir que pronto se volverá un pueblo fantasma y habremos de mudarnos. A pesar del hecho de haber vivido toda la vida aquí, no me incomoda la idea de dejar el pueblo, pues se ha vuelto muy solitario últimamente. Ahora que me he vuelto un adulto, de 21 años, y mi madre cada vez cae presa del cansancio, debo ocuparme de los asuntos del hogar, y estamos pensando seriamente sobre abandonar el pueblo o no. Si las cosas siguen así, y el pueblo queda inhabitado, deberemos abandonar irremediablemente.

 

El día de hoy, me he llevado uno de los peores espantos de mi vida. Hoy supuestamente, era el día de empacar las cosas para iniciar la mudanza. Pero alguien ha querido retrasar mi partida, por lo visto. Solía trabajar en un local de pizzas. Era repartidor. Digo solía, pues hoy venía de vuelta del trabajo después de encontrar el local cerrado. Llamé a mi jefe para pedir explicaciones, pero la línea estaba muerta. Los teléfonos públicos en el pueblo tampoco funcionaban, y ahí fue cuando me comencé a preocupar, pero la sorpresa fue aún más grande cuando llegué a mi hogar. Pensé que me encontraría con mamá allí como de costumbre, pero no había rastro de ella. Lo intrigante fue, que encontré un video sin etiqueta sobre la mesa. El formato era VHS, por lo que tuve que ingeniármelas en como reproducirlo. Creía no contar con tal reproductor, hasta que recordé que en el sótano contábamos con uno viejísimo. Era cuestión de suerte si aún funcionaría. Al momento de conectarlo a la corriente, encendió sin problemas. Parecía funcionar aún, a pesar de haber estado lleno de polvo. Fue necesario un buen soplido antes de ponerlo a trabajar.

El video era confuso; Una silueta amarrada a una silla. Con espanto, reconocí a mi madre. Ella era la silueta amarrada a la silla. Instintivamente apreté los puños, y percibí una voz siniestra que hablaba en el vídeo:

-Steve. ¿Quieres volver a ver a tu madre nuevamente? Es hora de que cumplas con tu destino. Dirígete al hospital de las tinieblas, Alchemilla Hospital. Tienes tiempo de aquí hasta mañana, o me temo que tu madre será entregada a los brazos del demonio.

Di un golpe sobre la mesa motivado por mi furia. Me dañé los nudillos, pero no me importó ni un bledo en ese segundo. Alguna clase de terroristas tenían a mi madre cautiva. Lo que me extrañó fue que la voz del video no me pidió ninguna clase de botín. Pero aún así, tenían a mi madre cautiva. De ninguna forma se saldrían con la suya. Tenía planeado ir a ese tal hospital y traer a mi madre de vuelta.

Salí por la puerta, cuando me di cuenta que no sabía donde quedaba tal hospital. Volví confuso hacía mi hogar, sentándome en una silla al lado de la mesa comedor. Pero entonces, me percaté que allí había un documento sobre la mesa. No tengo idea por que no lo vi antes, pero estaba ante mis ojos. Lo examiné, y resultó ser un mapa del área comercial de Silent Hill. Allí, con tinta de marcador rojo, estaba señalado Alchemilla Hospital. Ahora que ya tenía el mapa, me dirigí de nuevo hacía la puerta de salida con dirección a mi destino.

Al salir afuera, casi me quedo ciego. En el patio de mi casa no se notaba tanto, pero ya una vez me encaminé por las solitarias calles del pueblo, la niebla era tan espesa que difícilmente se podía contemplar lo que tenías delante. Nunca antes había visto una niebla de este modo en el pueblo. Era realmente extraño.

La dificultad era grande, aún así estaba consciente de por donde caminaba y donde me dirigía. No solía ser una persona de carácter nerviosa, pero sentí cosquillas en la parte trasera de mi cabeza cuando unos pasos se escuchaban tras mío. Volteé para mirar, pero no había más que niebla. Luego, a medida que los pasos se acercaban, me di cuenta que no eran pasos de una persona que me seguía, sino que parecían patas de alguna clase de animal ligero. Quizás un perro.

Me tranquilicé, pero aún así volteaba cada cinco segundos para observar lo que había detrás de mí. Me detuve un segundo para observar el mapa, pues me encontraba un poco perdido. Al parecer, había tomado una calle mal.

-Me encuentro en la calle Koontz. Según el mapa, estoy a unas calles del hospital…

Examinaba el mapa con atención, cuando sentí una fuerte embestida en la pierna. Mi pierna flaqueó, y caí al piso, tomándome la pierna con ambas manos. Estaba adolorido, entonces me observé, y tenía un poco de sangre. Aún así, no parecía grave. Miré con extrañeza a la criatura que me había atacado. Lo primero que pensé, es que era alguna clase de perro rabioso. Lo extraño, era que no tenía pelaje. Sólo lo cubría su piel, y poseía manchas rojas dándole un aspecto realmente desagradable. Tenía dientes afiladísimos, los cuales no paraba de enseñarme, y parecía haber perdido los ojos. Me imaginé que era algún tipo de animal maltratado. Sentí un poco de lástima por este ser, sin embargo el parecía no tenerme compasión. Quería derribarme. Lanzaba embestidas contra mí, las cuales yo por una mísera distancia lograba esquivar gracias a mis entrenados reflejos.

 

Me dicen que les parece, por favor.

Link to comment
Share on other sites

  • 2 weeks later...

Create an account or sign in to comment

You need to be a member in order to leave a comment

Create an account

Sign up for a new account in our community. It's easy!

Register a new account

Sign in

Already have an account? Sign in here.

Sign In Now
×
×
  • Create New...