Respondiendo un poco la respuesta original, en la Biblia encontrarás que Dios no se anda por las "ramas", es decir no se desgasta trabajando en las consecuencias, sino que va al origen. Es cierto que Jesús en su ministerio manifestó el reino de Dios liberando endemoniados, los cuales eran poseídos por espíritus malignos debido a alguna condición o situación previa, pero no eran los endemoniados los que daban testimonio ni excusas de su condición, sino el o los demonios que los poseían. Si bien satanás tienta al hombre, y lo más probable es que esta persona sienta esa fuerte influencia, es el hombre el que toma la decisión de acceder, en este caso a la droga. Normalmente se mal entiende la diferencia entre ser tentado y realmente ceder a la tentación (Santiago 1:12-15), en este último caso sería bueno hacerle ver al hombre que es su responsabilidad (si es así como él dice) el ceder, confrontarlo y a la misma vez mostrarle lo dicho en 1 Corintios 10:13... que Dios es fiel y que no lo dejará ser tentado más allá de lo que pueda resistir y es más le dará la salida... En Santiago 4:7 dice que si primero: nos sometemos a Dios y segundo: resistimos al diablo el huirá de nosotros. Es importante entender que ante estas situaciones la palabra de Dios rompe los argumentos medio chuecos o las mentiras sutiles. Espero que sean de mucha ayuda y esta persona pueda conocer que la religión no salva a nadie, sino una relación con Jesucristo, porque como dijo Jesús "conocerán la verdad y esta los hará libres".
