Jump to content

¿ERES ADICTO AL SUFRIMIENTO?


Recommended Posts

¿ERES ADICTO AL SUFRIMIENTO?

 

 

En mi opinión, hay personas –no todas, afortunadamente- que han encontrado su zona de confort en un sufrimiento en el que han decidido instalarse a perpetuidad, y cualquier alternativa que se les ofrezca para que la abandonen es automáticamente rechazada y hasta justifican el rechazo.

 

Hay personas –no todas, afortunadamente- que caen en eso que se denomina “Indefensión Aprendida”, que es un tipo de comportamiento que desarrollan algunas personas por el que se sienten incapaces de reaccionar y actuar ante cualquier situación que les agreda, por dolorosa que sea, porque en su convencimiento interno están seguras de que no van a poder afrontarlo, ni cambiarlo, y creen o están convencidas de que sólo les queda la opción de padecerla como mejor puedan, y por ello se inhiben ante la situación y se quedan pasivos.

 

Como su propia definición indica es “Aprendida”, o sea que no forma parte de la naturaleza del Ser Humano, y es algo que lo mismo que en algún momento se ha decidido incorporar –voluntaria o involuntariamente- también se puede modificar o eliminar.

 

Para ello hay que ejercer una re-decisión, y cambiar aquello que se decidió hacer –casi siempre sin ser muy consciente de ello- en las situaciones conflictivas en las que uno se ve en inferioridad de condiciones para afrontarlas, marcado por sus miedos o por sus dudas, afectado por la inexperiencia o por una baja autoestima.

 

Conviene ser conscientes de esos momentos en que nos quedamos aferrados al sufrimiento y no nos podemos mover, no sabemos dar un paso coherente, y no somos capaces de ver una solución o una salida.

 

Tenemos que comprobar cuáles son los mecanismos o impedimentos que nos mantienen en esa situación de sufrimiento, qué es lo que nos impide salir de esa cárcel sufriente en la que nos quedamos voluntariamente encerrados, y entonces borrar todos los mandatos que nos hemos impuesto.

 

Conviene aprender y poner en práctica nuevos comportamientos –algo imprescindible a la vista de que los actuales no nos resultan beneficiosos-, y empezar a enfrentar y resolver conflictos, comenzar a deshacernos del sufrimiento en vez de aceptarlo desde la rendición anticipada, y aprender –o desaprender- todo aquello que nos ayude –o nos impida- salir de la espiral autodestructiva en la que nos enreda el sufrimiento.

 

Conviene tener confianza en uno mismo –y comprobar si es un asunto de falta de autoestima o es que unos miedos inútiles e irrazonables nos mantienen cautivos-, y ser muy conscientes de que cualquier cambio requiere un esfuerzo, y dejar de creer en ese engaño de que las cosas cambian por sí mismas, de que sólo dependen del azar el presente o el destino de cada uno, de que cualquier intento de oponerse a lo indeseable está condenado al fracaso.

 

Conviene tener unas expectativas optimistas con respecto a uno mismo y las propias posibilidades, y aplicar todo el esfuerzo que salir del sufrimiento requiera, porque el resultado compensa cualquier sacrificio.

 

No son el azar, ni el destino, ni el futuro, quienes van a sacarnos de nuestros estados desagradables. No somos las víctimas predilectas de la fatalidad, ni estamos predestinados a la desgracia. Nuestra vida es nuestra responsabilidad. Y esto ya lo he escrito mil veces.

 

Salir del sufrimiento también es nuestro cometido y nuestra incumbencia. Y esto se logra comprometiéndose con uno mismo a cambiar o quitar o añadir cuanto sea necesario, y realizando lo que ello requiera; para ello es necesario averiguar qué hacemos de un modo inconsciente que nos perjudique, para remediarlo e impedir que se siga perpetuando su nefasta influencia, y es necesario mandar en nuestros pensamientos en vez de conformarnos con soportar sus errores y su tiranía.

 

Hay que cambiar los pensamientos recurrentes perniciosos, y revisar todo aquello que hagamos o pensemos de un modo inconsciente, sin decidirlo libremente. Y hay que deshacerse del drama y del sometimiento.

 

Somos Seres Humanos en continua evolución, y eso implica progresar hacia mejor y deshacerse de todo aquello que lo impida.

 

Hay que eliminar los pensamientos negativos o catastrofistas, los miedos, las rutinas, los auto-impedimentos, y todo aquello que nos paralice ante cualquier tipo de agresión.

 

Hay que buscar alternativas, soluciones, tomar decisiones, salir de la apatía o de esa Indefensión Aprendida, promocionar nuestro beneficio y quererlo siempre para nosotros, espantar los pensamientos agoreros que nos hacen creer que perderemos siempre, que estamos mal predestinados, que la felicidad no nos corresponde.

 

La fuerza ya está dentro. Las decisiones y la voluntad las tiene que aportar cada uno.

 

De ti depende.

 

Te dejo con tus reflexiones…

 

 

Francisco de Sales

 

 

Si te ha gustado ayúdame a difundirlo compartiéndolo.

(Más artículos en (Palabra Censurada, está prohibido el SPAM)index.php?action=forum)

 

 

 

 

 

 

 

Link to comment
Share on other sites

Create an account or sign in to comment

You need to be a member in order to leave a comment

Create an account

Sign up for a new account in our community. It's easy!

Register a new account

Sign in

Already have an account? Sign in here.

Sign In Now
×
×
  • Create New...